Pasos para hacer la sopa de tomate y sandía:

  1. Prepara todos los ingredientes y, en una olla con agua hirviendo, añade los tomates enteros durante 5 minutos hasta que la piel se desprenda.
  2. Déjalos enfriar y retira la piel. Ahora añade en la batidora los tomates, cubitos de hielo y la sandía cortada en trozos grandes (sin semillas) para licuarlos hasta que la mezcla sea homogénea.
  3. Rectifica con sal al gusto, si quieres puedes ponerle una pizca de pimienta.
  4. Para la presentación de la sopa fría, añade unas láminas o tacos finitos de sandía con un poquito de orégano. Si quieres, también puedes añadir unos picatostes y un poco de pimienta negra recién molida. ¡Disfrútala!
  5. Puedes macerar todos los ingredientes cortados (excepto el aceite) la noche anterior. Al día siguiente solo tendrás que triturarlo todo, dejarlo enfriar y tu plato estará listo.

Una sopa sencilla y riquísima

El punto fuerte de esta receta es que, pese a su sencillez en cuanto a elaboración, la combinación de sabores es realmente exquisita. Si quieres hacerla todavía más refrescante, puedes añadirle hierbabuena o menta. La sopa fría de tomate y sandía funciona de maravilla como entrante previo a cualquier plato. También es una receta que te puede ayudar a que los más pequeños coman fruta y verdura disfrutando de la comida. 

Debido a la gran cantidad de agua que contiene, también se convierte en un plato diurético además de muy nutritivo.